17/2/09

DE COPITOS Y SONRISAS


No pude evitar una sonrisa , cuando mis mandíbulas recuperaron su posición.
El chirriar de sus utensilios me resulta tan familiar y su recuerdo siempre esta asociado a mi infancia.
Como un ritual todos los martes salia a mediodía del colé. Mi madre me compraba un tebeo y tomábamos el autobús. Pacientemente los leía en la sala de espera de Dr. Mariano Zarate Burrutia. Allí sonreía viendo a Tom y Jerry, Pixi y Dixi, Pepepotamo, scooby (ese me hacia menos gracia), etc...Ni que decir tiene que hice la colección completa.
Dos años por la gracia de un jarabe que me pico los dientes.
Así que hoy cuando después de la rutinaria limpieza de boca, me dieron cita para después de Reyes. Recordé a mis "Copitos" que tomaron rumbo a las laderas del Nevado del Ruiz en las Navidades del 85. Llame a mi madre para darle la enhorabuena y celebrar que por segundo año consecutivo puedo sonreír de oreja a oreja.
Lastima no recuerde los adivinos que pronosticaron que a los 18 llevaría dentadura postiza pues a esos me reiría en su cara.

1 comentario:

Anónimo dijo...

No hay nada que despierte una sonrisa más sincera que los recuerdos de infancia, verdad? Aunque parezcamos ya los abuelos cebolleta..eso sí, la dentadura intacta y con piezas originales. ;)